El espacio, la frontera final...
Esta serie de los 60's ha sido mi preferida durante toda mi vida, siempre me ha apasionado saber qué existe mas allá del horizonte que pueden divisar los ojos, sea através de un telescópio o por intermedio de un robot espacial.
Y claro que he visto todas las películas Star Trek, sea con la primera generación, como la siguiente. Así es que ir la semana pasada al cine para ver la PRECUELA, realmente fue natural.
Viví con expectativa el ingreso de cada personaje a la mítica nave, el Enterprise, y cómo empezaron las relaciones entre sus tripulantes.
Me llamó en sobremanera la atención la profunda amistad entre tres de sus personajes, que se verá reflejada en todas la películas.
Kirk, Spock, McCoy, representan ese diálogo comunitario por excelencia. Esa necesidad constante de pertenencia y servicio; esa sumisión y respeto mutuo, que los hacía fuertes en los momentos de mayor debilidad.
Ellos encarnan el valor y la unidad, solos son nada, juntos son capaces de crear futuros de esperanza. La amistad es natural, y el sacrificio por el otro es la demostración de que el amor no se basa en palabras sino en hechos reales.
No hay otra forma de que pueda existir amor, sino que exista comunidad.
¿Alguna otra prueba de que Dios es comunidad?
1 comentario:
Hola Jorge, yola vi por la internet jejejeje bien bacan.
Es cierto la amistad de ellos es sin mirar el hecho cinematografico muy practica, se mostraba en hechos lo que se profesaba en el corazon.
Me gusta mucho el desprejuicio de Kirk, me sorprende lo reprimido que estaba Spok y lo tan acido que es Mckoy.
Saludos
Ronich
Publicar un comentario