He participado en muchos intercambios de regalos, ya sea en el colegio, con la gente de la universidad, con la gente de mi trabajo, y por supuesto siempre con la familia.El año pasado me llamó mucho la atención la modalidad de “me quedo con tu regalo”.
Es más o menos así, vienen los participantes con un regalo por un monto acordado previamente. Y luego de cerciorarse que hay un número par de participantes, se procede a tomar un papelito donde se halla el turno de participación.
Los regalos son acopiados en un lugar, y el que tomó el papel con el número 1 escoge un regalo, lo abre y lo muestra a todos.
A continuación, el que tomó el turno número 2, tiene dos opciones, o coge un regalo nuevo o pide el regalo a su predecesor.
A continuación, el número 3, puede tomar un regalo sin abrir, o puede quedarse con el regalo del número 1 ó del 2.
Así sucesivamente hasta el final. Recuerdo que varios regalos pasaron por muchas manos el año pasado, y fue un tiempo de compañerismo entre la gente de la iglesia.Y es que intercambiar regalos, es como decir lo mucho que apreciamos al que se halla a nuestro lado, es celebrar juntos el mayor regalo en la historia de la humanidad... Jesús entre nosotros.
2 comentarios:
Hasta que por fin actualizaste tu Blogger, ya era hora ;-)
Hola Abel, tienes razón, confieso públicamente que siempre he sido muy lento para los dibujos y diseños.
Es mas, en el colegio, intercambiaba tareas con mis amigos, por ello siempre salía aprobado en Arte y mis amigos en matemáticas.
Hoy en día, admiro el trabajo de muchos amigos que se dedican a la pintura y otros al diseño gráfico, ya que veo en ellos aquel talento que no poseo.
Saludos...
Publicar un comentario