Cuando reconocemos el egoísmo natural, la cobardía al afrontar las situaciones o las palabras hirientes que hemos pronunciado a las personas que más queremos, a través de una sencilla palabra pero poderosa llamada PERDÓN, cuando esta cargado con una actitud genuina, es un buen inicio para restaurar relaciones, y traer salud a la Comunidad.
Perdonar y ser perdonado debe constituir un hábito en la vida de todo discípulo de Jesús, más aún cuando como jóvenes hemos hecho sentir pésimo a nuestros padres quienes con un consejo sabio han querido ayudarnos y nosotros, por el ímpetu de la inexperiencia, hemos querido hacer nuestro parecer y nos hemos distanciado de ellos.
En este video, este cantante muestra estos sentimientos cuando dedica el tema a su propia madre en un concierto...
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